Es importante preocuparse por mantener siempre una buena energía tanto en nuestras casas como en el lugar de trabajo para que las cosas fluyan en armonía.
Normalmente no solemos reconocer su importancia, pero las limpiezas energéticas de los espacios son esenciales y necesarias para desprendernos de la negatividad acumulada en el ambiente y mantener el equilibrio, la positividad, la paz y el bienestar.
Son indispensables para protegernos, tanto a nosotr@s mism@s como a nuestras casas y negocios.
Igual que tenemos cuidado en mantener limpio y ordenado el espacio físico, es muy importante que aprendamos y tengamos en cuenta la limpieza de aquello que no vemos.
¿Sabias que es tan importante limpiar y mantener en óptimas condiciones el plano material, como el hacer lo mismo en todos los otros planos?
Las personas somos receptoras y emisoras de energía.
Los lugares en que estamos, acaban reflejando nuestros estados de ánimo. Cuando estos no son buenos, la energía negativa que generamos a nivel interno se desprende al exterior y va impregnandose en el espacio.
Seguro que alguna vez has sentido un espacio cargado. Su energía es densa (como cuando decimos que se podría cortar el aire con un cuchillo), sientes pesadez en el ambiente y una negatividad que te envuelve cuando entras en una estancia.
¿alguna vez te has puesto de mal humor o triste al entrar en algún sitio y no has sabido el porqué?
Todo esto es debido a que los lugares se van impregnado de la energía que emiten cada una de las personas que conviven, trabajan o pasan por ellos.
Cualquier sitio dónde haya con mucha frecuencia discusiones, conflictos, peleas, envidias o un ambiente competitivo, tienen predisposición a acumular malas energías.
Los efectos negativos que pueden provocar estas malas energías deben ser eliminados lo antes posible, para evitar que el lugar quede impregnado y nos afecten.
Los negocios y los lugares de trabajo, además, suelen ser sitios muy frecuentados, por lo que los hace también muchos más vulnerables a verse afectados por energías negativas.
Estas energías, no se limpian pasando la aspiradora y fregando el suelo, si no que necesitan de una limpieza más profunda, una limpieza energética, por medio de la cual podemos eliminar cualquier resto o tipo de energía negativa de un lugar determinado.
Es recomendable que, al igual que hacemos con nuestro cuerpo físico, limpiar energéticamente los espacios de manera habitual.
Algunas de los síntomas que nos avisan de que es necesario llevar a cabo una limpieza energéticas son:
- Si cada vez que entramos en el espacio, nos sentimos cansad@s, fatigad@s o agotados sin encontrarle explicación lógica.
- Cuando no tenemos ganas o no nos apetece estar en el espacio.
- Si en el espacio circulan diariamente muchas personas.
- En el caso de que sea nuestra casa, si tenemos problemas para conciliar el sueño, pesadillas o si nos cuesta descansar bien y recuperar la energía.
- Cuando escuchamos ruidos extraños o observamos presencia de sombras, o bien si nuestras mascotas tienen cambios en su comportamiento habitual sin motivos aparentes.
- Cuando hay problemas recurrentes o accidente con los equipos electrónicos, ordenadores y luces, sobre todo si esta clase de problemas suceden a menudo o pueden llegar a representar un peligro.
Recuerda que, una buena higiene energética, tanto personal como de los espacios es tan importante como una buena higiene física, pues de nada sirve limpiar la parte material, si esta sigue en contacto con un ambiente sucio cargado.